Albon no tiene la culpa de su accidente en Australia

Alexander Albon no pudo hacer nada contra su accidente en Australia. Así lo afirma el jefe de equipo James Vowles en un nuevo vídeo de Williams. Un cambio en el suministro de energía habría sido el culpable.

No es culpa de Albon despué de todo.

Para Albon, el Gran Premio de Australia llegó pronto a su fin. El tailandés rodaba entre los diez primeros tras una gran sesión de clasificación, pero las cosas se torcieron en la séptima vuelta. El piloto de Williams perdió el control de su FW45 en la curva seis y voló contra el muro. Después, Albon asumió la culpa, pero ahora parece que él mismo no pudo hacer nada al respecto.

En un vídeo en el que Vowles repasa el pasado fin de semana de carreras, también se habla del momento de Albon. Según el jefe del equipo Williams, Albon no podía haber hecho nada. ''La curva cinco está a tope en clasificación, pero en carrera es difícil. Por tanto, supusimos que tendría que levantar. Sin embargo, el coche funcionó mejor de lo esperado y pudo pasar esa curva a toda velocidad''.

Vowles explica

El hecho de que Albon pudiera pasar por esa curva a todo gas afectó a los sistemas de potencia. Éstos están preajustados para determinar en qué punto de la vuelta se utiliza la energía y en qué punto se ahorra. Esto se ajustó durante la carrera porque Albon aún podía pasar por esa curva a todo gas, pero ahí es donde las cosas se torcieron.

Como resultado, Alex iba diez kilómetros por hora más rápido en la curva cinco que en la vuelta anterior. Alex se dio cuenta de que iba demasiado rápido y tuvo que levantar el pie. Como resultado, se fue largo, haciendo que su neumático trasero izquierdo golpeara el bordillo. Esto no parece gran cosa, pero cuando los neumáticos están al límite tiene grandes consecuencias. Cuando entró en la curva seis, se dio cuenta de que no tenía el agarre de las vueltas anteriores''.

Así que resultó ser una acumulación de acontecimientos, por lo que la consecuencia final fue que Albon no tenía agarre en la curva seis. Así que no fue culpa del tailandés, sino una desafortunada confluencia de circunstancias que el equipo con sede en Grove tendrá que analizar.