Mientras que el Gran Premio de Japón amenazó brevemente con ser cancelado, el domingo en el Circuito de Suzuka terminó en una confusión. A estas alturas ya sabemos con certeza que Max Verstappen tiene su segundo título mundial en Japón. También para alegría de su compañero de equipo Sergio Pérez, que tuvo un papel clave en todo el asunto.
Charles Leclerc cometió un error cuando estaba presionado por Pérez, que le pisaba los talones al piloto de Ferrari en los últimos compases de la carrera. En el momento en que Leclerc se saltó la chicane, Pérez ya sabía que tenía razón, como se pudo escuchar en su reacción por la radio del equipo. Incluso antes de la ceremonia del podio, el monegasco recibió una penalización de cinco segundos.
Pérez se alegra por Verstappen
Esto llevó a Pérez al segundo puesto, pero lo más importante, para Verstappen, es que significó asegurar su segundo título mundial. "Fue un poco agitado con Charles", dijo Pérez en su entrevista posterior a la carrera. "Estábamos luchando mucho y yo intenté hacer un movimiento al final y creo que él se bloqueó y se fue por el exterior. Creo que fue una carrera justa. La sanción es justa".
Incluso durante su entrevista, se anunció que Leclerc recibía una penalización de tiempo y que Verstappen era el campeón del mundo, para alegría de Pérez. "Un gran resultado aquí y también para Honda. Es increíble. Un gran día para el equipo. Y un día en el que Max se convierte en campeón. Es un gran día para nosotros", se alegró Pérez, que subrayó que la clave ahora es que Red Bull mantenga este impulso hasta el final de la temporada.