Fernando Alonso tuvo una temporada difícil en Alpine debido a los numerosos abandonos. Sin embargo, el español no quiere comparar su última temporada con los años de desastre en McLaren-Honda.
Con seis abandonos, la temporada de Alonso fue difícil. En su último año para Alpine, los problemas empezaron ya en Arabia Saudí, después de lo cual el bicampeón del mundo sufriría problemas de motor o sus consecuencias (penalizaciones en parrilla) casi todas las semanas.
Mala suerte para Alonso
No es un territorio desconocido para Alonso. De hecho, durante su etapa en McLaren, las cosas fueron igual entre 2015 y 2018. Por aquel entonces, Alonso describió el motor Honda como un motor de GP2. Precisamente eso también marca la diferencia respecto a la temporada pasada. ''Nuestras sensaciones eran mucho mejores cuando terminábamos una carrera. Con McLaren-Honda, siempre estábamos fuera de los puntos'', declaró Alonso según Motorsport.com.
Alonso se marcha en 2023 a Aston Martin, que, aunque terminó por debajo de Alpine en la última temporada, sólo tuvo seis averías en total con dos pilotos. El motor Mercedes ha sido fiable durante años, lo que debería dar esperanzas a Alonso.