¿Qué aprendimos del primer ePrix? 'Los pilotos tienen que ir al gimnasio'

'Salvando las distancias', su actuación recordó a la de Max Verstappen. Jake Dennis condujo durante el ePrix de México, como el campeón del mundo holandés lo hizo a menudo la pasada temporada en la Fórmula 1: tomando la delantera con un adelantamiento perfecto, luego cogiendo una buena ventaja, perdiéndola debido a un coche de seguridad y volviendo a ganarla, para finalizar la carrera en primera posición.

Es, por supuesto, muy pronto en la temporada. Sin embargo, Dennis, que corre para el equipo de Michael Andretti, demostró que este año hay que tenerlo en cuenta. En una temporada que empezó sin un claro favorito, Dennis se presentó como aspirante al título.

Gen3

El ePrix de México fue el primero con los coches Gen3. El veredicto general -y de nuevo, sólo se disputó una carrera- es que no ha mejorado en términos de espectáculo. Mientras que la Fórmula E siempre fue conocida por sus numerosos cambios de posición, los adelantamientos resultaron mucho más difíciles con los coches de la nueva generación. Los pilotos advirtieron de antemano que se ha vuelto más difícil conducir muy cerca del piloto de delante, exactamente igual que ocurrió durante años en la Fórmula 1. Incluso con el modo ataque, adelantar a otro era difícil.

Los coches Gen3 han sufrido una gran metamorfosis. Los coches son más estrechos que antes y tienen más potencia (de 335 a 470). La Fórmula E también ha cambiado de proveedor de neumáticos, Hankook. Éstos demostraron tener menos agarre que los Michellin del año pasado, aunque los neumáticos son ahora más duraderos. En cualquier caso, provocaron que los coches derraparan más.

Dirección más pesada

Oliver Rowland, que vivió un fin de semana desastroso en su Mahindra, también declaró en exclusiva a GPblog que mantener los coches de nueva generación en la pista se ha vuelto mucho más difícil. "El gran cambio está en lo físico del coche desde la perspectiva del piloto", dijo Rowland. "Es bastante físico, la dirección es muy pesada, creo que con los neumáticos y el tren de potencia delantero, ha cambiado un poco esa característica y es algo que creo que la mayoría de nosotros hemos ido al gimnasio intentando fortalecer un poco los brazos".

Rowland admite sinceramente que durante años no fue necesario un entrenamiento duro, para pilotar un coche de Fórmula E. Una muestra de ello la dio el año pasado Nyck de Vries en Monza. Aunque en aquel momento era el vigente campeón de la Fórmula E, el holandés salió del Williams completamente destrozado tras su incursión en la Fórmula 1. "Cuando dejas de hacer F1 o F2, ya sabes, siendo realistas, la perspectiva de entrenamiento para la Fórmula E en los últimos años no era realmente necesaria, mientras que creo que iba a ser un elemento para los pilotos que ahora avanzan, que tienen que ser lo más fuertes posible para moverse conduciendo el coche", dijo Rowland.

En México, los pilotos se libraron de los graves accidentes que se temían. En la próxima carrera, en Arabia Saudí, ya debería haber nuevas normas para evitar de antemano un posible problema de frenado. Por cierto, quien no parece que vaya a estar en la salida es Robin Frijns. En un accidente en la primera ronda del ePrix, el holandés se rompió la muñeca. Fue operado en México.